Entre estos cambios durante el postparto destacan los que impactan a nuestros pechos. Una vez que tenemos a nuestro bebé en brazos, nuestras boobs están listas para la lactancia; y durante este periodo tus senos y pezones pueden lucir muy diferentes a los que conocías antes de convertirte en mamá.
Muchas de nosotras podemos sentir que somos las únicas a las que nos está pasando esto pero no, no estamos solas. FridaMom, una compañía enfocada en productos para bebés y mamás, decidió lanzar la campaña ‘Leaked: what milk-makin’ boobs actually look like’. para visibilizar los pechos durante el postparto y así veas que tener las areolas más grandes, los senos caídos, entre otras formas diversas de boobs es totalmente normal.
Venas más notorias
Las venas de tus boobs pueden ser mucho más notorias durante la lactancia, lo cual puede ser más evidente no sólo por su intenso color que contrasta con tu tono de piel, sino también porque tus pechos son más grandes. De hecho, cuando tus senos aumentan de tamaño, las venas se vuelven más visibles; ya que se dilatan para que el flujo sanguíneo circule bien por tus boobs.
Pezones más anchos
No sólo tus boobs aumentan de tamaño, también tus areolas, los cuales también pueden se oscurecen. Este cambio se debe por el aumento de los niveles de estrógeno durante el posparto. Con frecuencia, las areolas pueden encogerse después de un tiempo pero también es probable que conserven este nuevo tamaño.
Estrías
Así como tu baby bump pudo generarte estrías debido al estiramiento de la piel, el aumento del tamaño de tus boobs también puede provocarte esta tenues líneas en la piel.
Boobs desiguales
En general, muchas mujeres no tenemos nuestras boobs perfectamente iguales. Una puede ser un poco más grande que la otro, o apuntar hacia otro lado. Esta asimetría puede intensificarse durante el posparto y ser la nueva forma de tus senos, la cual compartes con un gran número de mamás en el mundo.
Puedes ver la campaña completa y las imágenes sin blur dando clic aquí.