Mis queridas amigas ciertamente esta nota va de cómo enseñarle a emprender a nuestros hijos desde pequeños, sin embargo, empezaré contándoles unas anécdotas personales; mi madre es ama de casa una mujer luchadora que me sacó adelante con mucho esfuerzo a través del tiempo para nosotros no fue fácil. En mi niñez me levantaba a las 3am para ir al trabajo de mi madre; allí esperaba mi colegial que llegaba a las 7am. Llegaba al colegio y regresaba a las 12pm a almorzar, me ponía a estudiar para luego esperar que saliera mi mamá del trabajo a las 5pm. Íbamos al súper y retornábamos a casa aproximadamente a las 7pm.
Por Miriam Martínez – @Spectrum.audiovisuales
No había tren ni había corredor; solo buses piratas y así pasó mi niñez. Mi hermana, también pilar del hogar, aprendió desde muy chica a trabajar y salir adelante en los estudios. Desde ese momento empezó mi madre y hermana a ponerme la espinita del emprendimiento, su dedicación y lucha son un motor muy fuerte en mi vida.
Actualmente con mi hijo de 2 años le enseñó el valor de las cosas, cuando vamos al súper él me ayuda a poner las cosas del carrito para pagar; una vez un desconocido comentó “con ese trabajo nunca más vendría al súper”; esto hizo que me cuestionara si lo que hacía estaba bien, pero al recordar todo lo que mi madre me enseñó me dije quiero que mi hijo sea emprendedor y que desde pequeño ayude a los demás.
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Mi deseo es que el sepa diferenciar lo que quiere de lo que necesita, aprenda de sus errores y desarrolle más experiencias. Es por ello que cuando está en casa le encanta ayudarme a barrer, a pasarme las horquillas sin pedírselo; no lo hace bien como es entendible, pero el hecho que me ayude le enseña a ser emprendedor y aprender.
«Estas son experiencias personales, y me han ayudado a inculcar el espíritu emprendedor en mis hijos.
Mi esposo pone a mi hijo mayor a trabajar y le da oportunidad de que se desenvuelva en la empresa que tenemos. En principio como todo joven no entiende que todo cuesta; incluso llegaba a hacer expresiones que como padre duelen, ya que si eres emprendedor sabes que el esfuerzo del día a día es o que hace un emprendimiento sostenible.
Con el paso del tiempo mi hijo empezó a ver el valor que tenía su dedicación. Pudo darse cuenta de lo que su padre hace y aprovechar las oportunidades que le ofrecimos.
El trata de dar lo mejor de sí. Para ser emprendedor debemos aprender a desarrollar nuestras habilidades y capacidades, mediante la unión de experiencias y así fomentar ese espíritu; por eso lo hacemos sentir parte de cada proyecto y que de ese modo se pueda realizar personalmente.
Espero que estos datos te ayuden, para que también te motives aprendas sobre cómo enseñarle a emprender a nuestros hijos desde pequeños.
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