Es una costumbre que se ha adoptado en los últimos años y cada vez se vuelve más necesaria. Pregúntate, cuántas veces te has ido a dormir sin ver tu celular o cualquier aparato electrónico antes. Puede ser que te sorprendas al analizar la respuesta.
La mayor parte del tiempo ocupamos minutos para jugar, bajar aplicaciones, leer noticias y hasta para chatear en nuestro celular. Expertos recomiendan hacer un esfuerzo por mantener los teléfonos fuera de tu habitación para evitar la tentación de verlos antes de acostarse.
Todo empieza en nuestro ritmo circadiano, el cual determina cuando el cuerpo libera hormonas y se controla por de la exposición a la luz. Cuando revisas tu celular por las noches, se envía una corriente de fotonoes directo a los ojos y dicta al cerebro no producir melatonina, una hormona que nos hace sentir cansados.
Esta explicación es comprobable cuando te levantas al baño por las noches, le echas un vistazo a tu celular y luego intentas reconciliar el sueño, lo cual te es imposible.
Lo que al final logramos es estar despiertos durante más tiempo y no descansar lo suficiente, ya que pierdes tiempo al momento de dormirte. Esto puede afectar en tus actividades personales y laborales.
Los adultos necesitan dormir de 7 a 8 horas diarias, aun que sientas que no lo necesitas debes hacerlo. Tu “reloj biológico” se programa según las horas de sol, lo que ayuda a estar despierto durante el día y sentir la necesidad de dormir durante las noches.
Haz la prueba y verás que con la perseverancia ya no necesitarás ver tu celular antes de dormirte. Esta es una practica que debe inculcar con tus hijos. No más noches de insomnio, deja que tu cerebro descanse y se relaje por la noche.