Una de las cosas que más se valoran en estos días es el compromiso que tenemos con nuestros emprendimientos. Sé que no es algo que pueda medirse con precisión, pero si puede evaluarse con base en cómo actuamos ante las cosas más pequeñas que administramos en nuestra vida.
Por Karina Guerrero – @kmcb.consulting
De hecho, este es uno de los componentes claves que debe tener presente toda emprendedora para lograr los resultados que desea. Solo para poner el tema en contexto, compromiso se define como una “obligación contraída”.
Te comparto algunos ejemplos de compromisos que usualmente se incumplen:
- Firmas un acuerdo de confidencialidad sobre algún tema y en la primera reunión social te encuentras hablando de ese tema.
- Agendas una reunión a las 8 am y terminas llegando al menos 30 minutos después.
- Acuerdas la entrega de un informe para un día viernes, y lo envías ese día a la media noche (ya no es viernes!!).
- Indicas que te harás cargo de una parte del servicio en un evento con un grupo de personas, y terminas notificando que no asistirás.
- Realizas una planificación de actividades y terminas haciendo un informe indicando las razones por las cuales no fuiste capaz de cumplirlas.
- Estableces un costo por entrega tardía de tus productos o servicios, y lo que sucede es que este es “usado” más de lo planificado.
- Defines unas normas de uso de los recursos y eres la primera en incumplirlas.
Puedo continuar, y la lista puede ser infinita de ejemplos donde usualmente faltamos al compromiso que establecemos con las cosas, muchas de ellas básicas de nuestro día a día como empresarias.
Te invito a realizar una lista de esas cosas en las que pones tu palabra (en forma escrita o verbal) donde indicas que cumplirás con alguna cosa y luego te observas no honrando lo acordado. Para este ejercicio considera tanto aquellas cosas personales como las de trabajo / negocio.
En general, son estas cosas las que te alejan de alcanzar los resultados que estás buscando con tú negocio.
Sigue Karina Carrero de The Company Doctor aquí.