Unión de las 4E, para crear un semillero de productividad: Estado, Empresas, Empleados y Emprendedores.
De acuerdo al último informe de la firma Baker& McKenzie “COVID-19 Global Employer Guide”, podemos observar las líneas identificadas como OPORTUNIDADES, en virtud del análisis DAFO que realizó el experto de la firma Carlos de la Torre García, aquí mencionadas:
Por Ani Rodríguez – @proideha
Son oportunidades ante esta Pandemia:
- El cambio en el modelo productivo, tras el COVID 19 puede ser una oportunidad para diversificar, ahora sí, el modelo de crecimiento y apostar por sectores emergentes no tan expuestos a esta crisis sanitaria, aunque se necesitarán recursos en conocimiento, tecnología y competencias.
- El auge del trabajo a distancia y del teletrabajo, tras el COVID 19 que es ya un éxito social a gran escala y con periodos prolongados y que permitirá a las empresas nuevos nichos de eficiencia y productividad.
- La movilidad intersectorial de trabajadores, que tras el COVID 19 precisará un relevo no traumático de sectores más expuestos a nuevos yacimientos de empleo lo que precisará un análisis estratégico de necesidades de empleos en perspectiva sectorial y la aportación de recursos para financiar la formación y capacitación y acciones de reciclaje de trabajadores que cambien de sector, actividad y ocupación.
- El reforzamiento del sistema público de prestaciones y subsidios de desempleo, puede que establecer una normativa sea un primer paso para un seguro de desempleo en los países que no lo tienen contemplado como medida de contingencia.
- El diseño de nuevas políticas activas de empleo y de formación con la coordinación necesaria con las políticas pasivas y asignación de recursos económicos extraordinarios que permitan y ayuden a una recuperación económica y del empleo más rápida e incentiven la empleabilidad.
- La aprobación de nuevas medidas fiscales y económicas para facilitar liquidez a las empresas, emprendedores y autónomos y a los hogares con fórmulas nuevas como los créditos fiscales que puedan otorgar o medidas innovadoras lanzadas por los expertos como líneas de emergencia a través de préstamos a los hogares a través de activos financieros a través de las entidades financieras o fórmulas de tarjetas monedero de pago electrónico con tipos negativos avaladas por el Estado con fondos nacionales.
- La igualdad y la diversidad y la inclusión social que tras el COVID 19 será más necesaria para su integración en las estrategias empresariales y como motor de desarrollo de negocio.
- La innovación como palanca de recuperación de la actividad económica tras el COVID 19.
- La responsabilidad social de las empresas todavía con mayor potencial durante la crisis sanitaria del COVID 19 que no solo se refiere a la asignación de donaciones para la investigación de una vacuna o de fármacos que permita extender a toda la población la inmunización contra el virus sino también en la relación interna con su principal grupo de interés (los empleados) y que debe permitir buscar fórmulas consensuadas para el mantenimiento del empleo y evitar los despidos.
Definitivamente una gran oportunidad es la unión de Estado, Empresas, Empleados Y Emprendedores, es lo que determinará la reconstrucción económica después de esta crisis sanitaria mundial; y no serán los mismos roles a los que se debe apuntar, el enfoque es crear más participación horizontal y toma de acciones cooperativas.
Esta realidad es de todos y juntos podemos salir adelante, utilicemos el potencial de nuestro cerebro para la elaboración y ejecución de Planes de Acción.
Si tú estás leyendo estas oportunidades y puedes crear opciones de rescate e impulso de la economía, no permitas que se vaya ese poder único y autentico que tienes de aportar desde una idea que luego vaya evolucionando, queremos unir ideas para hacer un semillero de productividad.
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