Mantener el hogar limpio es una tarea constante que, en muchas ocasiones, demanda una gran cantidad de tiempo.
Sin embargo, existen habitaciones en la casa donde se debe priorizar su limpieza, a diferencia de otras, que bien se pueden limpiar solo una vez a la semana. Dentro de los espacios que se deben asear constantemente se encuentran la cocina y el baño, espacios donde se encuentra materia orgánica y son los preferidos por animales desagradables que rápidamente se pueden convertir en una plaga.
A pesar de que en la cocina se preparan los alimentos que ingerirán los integrantes de la familia, se considera más limpia que el baño, lugar destinado para realizar las necesidades fisiológicas de las personas, además de ser un espacio destinado para la propia higiene.
El baño es considerado uno de los espacios más difíciles de limpiar debido a la constante presencia de agua, lo que genera acumulación de sarro.
¿Qué es el sarro?
De acuerdo con un artículo, el sarro son las incrustaciones calcáreas provocadas principalmente por alta concentraciones de sales de calcio y magnesio en el agua. Cuando el agua tiene esta concentración de sales tan alta se dice que es agua dura o que tiene una dureza alta.
El baño presenta un constante flujo de agua en la regadera, lavamanos y por supuesto retrete, generando que, con el paso del tiempo, el cúmulo de sarro provoque manchas amarillas que, dan un aspecto de suciedad en el hogar.
En la actualidad, existen múltiples artículos de limpieza en el mercado, sin embargo, las fórmulas químicas de estos detergentes suelen ser muy abrasivos, tanto con los humanos como con los materiales con los que están elaborados los inodoros, generando que se pierda la capa de brillo con la que cuentan.
Es por eso que, en esta ocasión te diremos una forma de eliminar el sarro acumulado de tu taza de baño y dejarla como nueva.
Sal
Sabemos que a nadie le gusta que el retrete de su casa presente manchas amarillas y un aspecto de suciedad, pero, tampoco arriesgar a la familia a intoxicaciones con los productos químicos, por lo que, los ingredientes naturales se han convertido en nuestra mejor opción.
Para eliminar el sarro acumulado de la taza del baño, basta con agregar sal durante la noche. Para hacer más efectivo este truco, puedes colocar partes iguales de sal de mesa con bicarbonato de sodio y adicional, colocar unas gotas del aceite de tu preferencia, esto último para obtener un agradable aroma.
Lo único que debes hacer es incorporar perfectamente los ingredientes y una vez que consigas una mezcla homogénea, coloca de manera generosa sobre el retrete, dejando actuar durante toda la noche.
Al día siguiente, calienta 2 litros de agua y retira del fuego cuando se encuentre en punto de ebullición. Apoyándote de unos guantes para cocina, toma el recipiente y verte el líquido sobre la taza de baño, deja actuar durante 5 minutos y pasado el tiempo, tira de la cadena para eliminar los restos de la mezcla y suciedad.
La sal sirve para reducir o eliminar posibles hongos y bacterias, debido a su salinidad, además de que se ha visto que este mineral es ideal para absorber malos olores, por lo que amaras los resultados.