Cada hito del desarrollo de nuestros hijos es un evento maravilloso y trascendental sin lugar a dudas.
Por María Fernanda Betti – @eligeamamantarasesorias
Comenzar a comer no queda fuera de esto, implica crecimiento, maduración y desafíos tanto para nuestros bebés como para nosotros mismos como padres.
Desde el año 2002 la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda lactancia materna/fórmula exclusiva hasta los 6 meses y luego continuar con lactancia materna/fórmula complementada con alimentos.
Estas recomendaciones favorecen el adecuado crecimiento de nuestros hijos, disminuyendo el riesgo de alergias, obesidad, problemas renales, entre otros. Es un momento para el cual nuestro bebé debe estar preparado, desde el punto de vista orgánico, motriz y emocional.
Pero es un hecho que nosotras cómo mamás también necesitamos estar preparadas para esta grandiosa etapa.
La incorporación de alimentos nos pone frente a un bebé más independiente, con gustos y habilidades propias y debemos estar listas para mostrarles este mundo de alimentos de colores, texturas y sabores.
Te invito a que te contestes estas dos preguntas:
¿Qué es lo que buscas… ¿que tu bebé coma? o ¿que tu bebé quiera comer?
Parecen la misma pregunta, pero no, hay un abismo de diferencia.
Tómate el tiempo de reflexionar al respecto. Te ayudará a que el momento de la comida no se viva como una «lucha de poderes»… sino como la oportunidad de nutrirse en todos los sentidos.
Muchas son las emociones, ideas, creencias, expectativas que ponemos en la alimentación de nuestros hijos; pero ninguno de ellos nos deben alejar de los conceptos de respeto, paciencia, tolerancia y amor los cuales deben estar presentes cualquiera sea el método de alimentación que elijamos.
¿Te imaginas a tu bebé siendo el protagonista de su alimentación? ¿Que disfrute comiendo y esté incorporado a la mesa familiar desde el primer momento?
Hoy quiero presentarte un método mediante el cual tu bebé será el protagonista, quien decida qué comer y cuánto…
¿Qué quiero decir con esto?
Que a través del Método Baby Led Weaning tu bebé se alimentará a demanda y será él quien decida qué tomar de las opciones que se le presentan, cuánto comer y a qué ritmo.
Un método que permitirá respetar los tiempos de los bebés, respondiendo a sus necesidades y a sus signos de hambre-saciedad como también irá promoviendo el desarrollo de habilidades cada vez más complejas, entre ellas la masticación y la pinza fina.
No hay métodos buenos o malos, si el método que eliges se para en la vereda del respeto, el amor y la paciencia.
Elijas cuál sea, recuerda que tu bebé debe estar listo para ello. Dentro de los requerimientos se encuentran:
1-Tener cumplidos los 6 meses de edad.
2-Lograr mantenerse sentado solo con la cabeza erguida.
3-Haber perdido el reflejo de extrusión de su lengua.
4-Muestra interés por la comida/alimentos.
5-Sabe manifestar saciedad/hambre con sus gestos.
Cada niño es único, con necesidades y gustos propios. Cada familia también es única, con una dinámica propia. Anímate a profundizar más sobre este método y darle una oportunidad en la vida de tu hijo.
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