«Tu cuerpo es tu templo«. Hemos escuchado miles de veces ese popular mantra que nos anima a amarnos y tener una relación saludable con nuestro físico. Pero, a pesar de todos los movimientos que han ido surgiendo en los últimos años, todavía hay quien cree que la clave para adelgazar está en restringir su dieta o saltarse momentos tan importantes como la cena.
Es cierto que, después de un largo día fuera de casa, puede que lo que menos te apetezca sea cocinar platos elaborados o saciarte con comidas copiosas. Pero ya nada de eso será una excusa, porque hay un alimento que puedes preparar en menos de 10 minutos y te ayuda a adelgazar de forma sana y natural.
Una cena a la francesa
Estamos hablando de uno de esos superalimentos de los que puedes sacar el máximo partido en cualquier plato que se te ocurra: en tortillas, como revuelto, acompañando caldos y guisos, y de la forma más sencilla posible, hervido.
El huevo pasado por agua está especialmente recomendado para irnos a dormir con el estómago lleno, pero sin sentir pesadez. En realidad, se aconseja incorporarlo (con moderación) siempre que tengamos la oportunidad, ya que es un alimento muy completo que contiene casi todos los nutrientes esenciales para el ser humano.
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Su generoso aporte de proteínas −alrededor de seis gramos− nos ayuda a estabilizar el nivel de azúcar por la noche. Igualmente, el huevo contiene antioxidantes, ácido fólico y colina, tres elementos clave para el buen funcionamiento del organismo que facilitan el adelgazamiento.
Este último nutriente, la colina, es muy importante para las mujeres embarazadas, ya que previene problemas en el tubo neural que el feto necesita para desarrollar su cráneo y columna vertebral.
El huevo es una fuente extraordinaria de proteína magra que nos llena al tiempo que eleva el gasto metabólico. Según los datos publicados por el National Center for Biotechnology Information, «los huevos tienen un índice de saciedad un 50% más alto que el pan blanco o los cereales para el desayuno».
Y todo ello con un escasísimo aporte calórico. Un huevo mediano o grande tiene unas 60 kcal, por lo que lo mejor es que lo acompañemos de otras verduras al vapor y pescados como la merluza.
También tiene un alto contenido de carotenoides, vitamina A y E, ácido fólico, zinc, magnesio y selenio. Con estos antioxidantes podemos favorecer una digestión eficiente y, de paso, retrasar el envejecimiento celular. Parece que todo son ventajas, ¿no?
Pues aún hay más. Y es que, si hablamos de salud pública, múltiples estudios han confirmado que al menos la mitad de la población española tiene déficit de vitamina D. Una razón más por la que deberíamos aprovechar todo el aporte dietético que nos ofrece el huevo incorporándolo a nuestros platos nocturnos.
El huevo es uno de los alimentos más versátiles de nuestra gastronomía, fácil de conseguir, y a un precio que apenas notaremos en nuestro bolsillo. Si bien en el pasado se limitó su uso al considerar que podía estar influyendo en el aumento progresivo del colesterol en la población, hoy está más que desmontado el mito y los expertos recomiendan todo lo contrario.
Según la Fundación Española del Corazón, «no es necesario restringir el consumo de huevos en la dieta de personas sanas». En todo caso, se aconseja consumirlo entre 1 y 3 veces al día, pues se trata de un alimento más que seguro que puede reducir el riesgo de diabetes y la aparición de enfermedades cardiovasculares.
