En nuestros tiempos, la palabra amor ha sido muy bombardeada. El matrimonio es cada vez menos valorado y escuchamos a menudo: «mejor ni te cases». Lo cierto es que el matrimonio no es fácil, pero lo que sí es claro es que si se cultiva, riega y abona puede perdurar el resto de la vida…
Por Martha López – @mass.contenido
Hoy te lo quiero demostrar: ellos son Any y Leonel, un matrimonio que a pesar de las circunstancias de la vida han permanecido juntos por más de 70 años.
Cuenta la historia que en su juventud, Any era bella, HERMOSA, sus ojos azules resaltaban de día y de noche, era una joven alegre y siempre muy inteligente. La mayor de 6 hermanos (5 mujeres y un varón). Fue la primera en casarse y Leonel tuvo que ser como el papá de algunas de sus hermanas, porque ellos se quedaron huérfanos desde pequeñitos.
Any siempre ha sido el soporte, el consejo, la virtud hecha mujer y el más grande consuelo de sus hermanos y Leonel siempre fue un hombre platicador, hospitalario, amable, lleno de conocimiento y buenos temas para conversar…
Padres de dos hijos, una niña y un niño. Y como todo, el tiempo pasa y los hijos se van… Tal cual, ellos también experimentaron ese nido vacío, aunque estaban sus nietos quienes los visitaban y siempre les demostraron su gran amor y admiración…
Hace un tiempo, entrevisté a Any y le dije: «Tía, dígame cómo vivir una vida tan feliz y a gusto como usted lo ha hecho, cómo durar tanto tiempo como pareja» y ella fue clara en lo que me dijo y como considero que sus consejos son oro, te los nombro uno a uno:
- «No enojarse por cosas que pasan»: Siempre hay circunstancias en la vida que nos enojan, pero hay que pensar con cabeza fría y saber platicarlas cuando se debe hacer.
- «Cuando nos enojábamos, él se iba y me daba mi espacio»: WOW, pensé, que sabiduría, yo trato de darle a la llaga hasta salirme con la mía, que equivocada estaba… Y la verdad, no es quien tenga la razón, es que los dos tienen un poco de razón y deben saber resolver.
- «Hay momentos buenos y malos»: Aunque querramos, no todo va a ser color de rosa. Siempre van a haber temporadas en que debemos ahorrar más y apretar más el dinero y otras veces de más abundancia.
- «Tú eres lo más importante»: Debo confesar que cuando me dijo esto, me puse hasta pálida. Any me dijo que ella siempre se daba sus momentos para hacer lo que más le gustaba, espacios a solas como pareja y sin hijos… Cuan importante es su consejo en estos días en que vivimos con tanta aceleración. Ojo, ella siempre estaba arreglada, presentable, con su pelito blanco pero siempre peinado.
- «Siempre me cuidó»: Era un derroche de amor de él hacia ella y debo decir que era recíproco porque se notaba…
Any y Leonel son el: «y vivieron felices para siempre», «hasta que la muerte los separe», «en la salud y la enfermedad», «prometo amarte en las buenas y en las malas».
Leonel llegó a sus 102 años, con achaques y una que otra enfermedad, pero siempre al lado de Any. Los dos juntos en su casita que construyeron por tantos años. Al final de sus días, Any cuido de él, ella a sus 95 años, pero siempre juntos. Y cuando te digo que ella cuidaba de él era tal cual como lo lees…
No quería que esto quedara solo en la mente de nuestra familia, si no como una demostración que el amor SI existe.
La vida transcurre y Leonel ya está en el cielo después de 102 años muy bien vividos y después de dejar tantos recuerdos en nuestros corazones.
Any aún está con nosotros y es como una joya para nuestra familia. ¡Somos testigos que tener una larga vida puede constar de agregar algunos ingredientes a nuestros días: AMOR, PAZ, ALEGRÍA, REFLEXIÓN, ORACIÓN y BUEN HUMOR.
Comparte esta nota con tu pareja y sigamos creyendo en el amor que perdura a pesar de todo, incluso hasta después de la muerte…
