En otras publicaciones he comentado que muchas decisiones con las empresas son muy personales, y esta es una de ellas.
Definamos primero una empresa pequeña
En cada país existe un estándar para clasificar a una empresa como pequeña, en algunos casos por el número de empleados (máximo 10) o por la facturación anual (máximo $150,000).
Por Karina Carrero – @kmcb.consulting
También podemos definir a una empresa como pequeña cuando carece de estructura organizacional y de procesos, y muchas de sus responsabilidades de funcionamiento recaen sobre su fundadora(or).
Para mi la definición es la suma de los criterios arriba mencionados.
¿Por qué no crece una empresa generalmente?
Con base en las empresas que he analizado puedo compartirte que para mi existen las siguientes variables que impiden su crecimiento:
- Variables de mercado:
- Se atiende un nicho de mercado en el cual existen múltiples competidores, y el consumidor es especialmente sensible al precio.
- Barreras propias del mercado para incursionar en nuevos canales: altos costos de incursión, burocracia, etc.
- Bajos incentivos que permitan obtener economías de escala.
- Poco o escaso acceso a capital (inversionistas o Banca) dada las variables arriba indicadas.
- Variables internas de la empresa:
- Capacidad profesional de la fundadora(or) de la empresa: acá está el fenómeno que le gustaría hacerlo, pero no tienen las habilidades para ejecutar un plan de acción para el crecimiento.
- Creencias limitantes: aunque las variables del mercado son favorables, los dueños de la empresa no creen en el potencial de su empresa.
- Bajo o poco análisis del potencial del mercado en el que operan, o mejor aún de mercados potenciales.
- Baja o poca visión estratégica para llevar un negocio.
- Zona de confort: los dueños de la empresa se encuentran en una zona de confort por el cual prefieren mantenerse como están, y no incursionar en nuevos proyectos para capitalizar aún más su inversión. En esta el riesgo es que muy pronto llegará un competidor al mercado que si tendrá “ganas” de comerse todo el pastel.
Si te identificas con alguna de estas variables lo que puedo recomendarte es comenzar a documentarte sobre cómo las empresas que admiras son lo que son en la actualidad, sus aciertos y sus desaciertos, y vayas preparándote para lograr esa elasticidad en tu visión que te permita ver las posibilidades de crecimiento que tiene tu negocio, y los retos maravillosos que te llevarán a lograrlo.
¡¡Piensa en grande, sino es muy aburrido!!
Karina Carrero, The Company Doctor, síguela en sus redes sociales aquí.